martes, 14 de junio de 2011

Sisifadas: 90

 - En estos tiempos que se puede escribir de todo sin saber casi de nada me siento cada día más ignorante.


Hará dos días disfrutaba de un rato de diversión, con mi pequeña, en una plazuela que hay frente a mi casa. Ella chutaba el balón y yo, desmañado, despejaba sus pelotazos.


Un anciano se cruzó por nuestra zona de juego. Bajo su brazo izquierdo una carpeta azul, con poesías me anunciaría después. En su otra mano un bastón, de esos que están tallados a mano, con nudos y desgastados por el uso.


Cuando llegó a mi altura se detuvo, y como camaradas de toda la vida se despachó a gusto charlando un rato conmigo. Me contó cosas de su vida, orgulloso de tener ya los 90 cumplidos. Me mostró fotos de sus nietos, tres. La pequeña de siete era la más traviesa, me la vendía, dijo con guasa.


Martina se acercó a reclamar mi atención, y el anciano, ufano por tener otro compadre de coloquio, se entregó más si cabe en el discurso.


Cuando se marchaba se volvió un instante y mirando a la pequeña le dijo -te acabo de conocer y ya te quiero.


Yo me quedé un rato pensando en sus palabras, y en lo bonito que es dar, y en poder dar hasta los 90. 

1 comentario:

GKom dijo...

Preciosa entrada del blog. Me encantan las sisifadas. Despliega tu creatividad, dibuja, escribe que lo haces muy bien y nos dejas a todos con la boca abierta cuando te expresas.