Para muchos el mejora japonés de Barcelona y por lo que a mi respecta también. El local no mata, tiene una decoración sencilla, pero la calidad de los productos y su elaboración te van a dejar pero que muy satisfecho. Eso sí, hay que reservar con bastante antelación. Si quieres rematar la faena pide sentarte en la barra, donde a parte de tu estomago también saciaras tu vista viendo como preparan los platos delante de tus narices, un espectáculo digno de disfrutar. No es barato, pero la calidad es de primera y vale la pena darse un homenaje de vez en cuando. Y te lo dice alguien que ha estado, y comido, en Japón...
Mas información | Shunka
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