Este puente ha sido un éxito cinematográficamente hablando. Cuatro películas, una para cada día, cuatro aciertos.
El vienes vimos Crazy, stupid, love una comedia entretenida con un argumento, que aunque viene siendo el típico sobre divorcios y reconciliaciones, tiene algún que otro giro que te sorprende. Además, los protagonistas están estupendos, sobre todo Ryan Gosling, actor y cantante canadiense, aunque como os digo todos están a la altura.
El sábado fuimos al cine a ver Mientras duermes que, aunque es una gran película y Luis Tosar un grandísimo actor, nos decepcionó un poquillo, quizás teníamos demasiadas expectativas en el film. Esta cinta de suspense trata sobre César (Luis Tosar) que es el conserje de un edificio. Su vida es una autentica amargura, porque nació sin poder sentir la felicidad, la única manera de intentar sentir algo es amargar la vida de los demás, y vaya si lo consigue.
El domingo tocó el turno a Margin Call, una película de moda en estos tiempos de crisis. La película trata sobre la especulación bursatil y la falta de escrúpulos de las empresas encargadas de menear el cotarro. Un cartel de lujo con el británico Jeremy Irons que merece especial mención.
El lunes descansamos, pero hoy hemos visto Secuestrados, una película española que consigue perfectamente sumergirte en la trama y asfixiarte y agobiarte a partes iguales. Una familia acomodada se muda a su nueva casa, pero esa misma noche irrumpen en el hogar unos extraños que pretenden conseguir el máximo dinero posible a toda costa.
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