La mayoría de nosotros estamos de vacaciones, el que haya podido escaparse estará en la tumbona de alguna playa o repantingado en una terracita tomandose un café con hielo, a otros como al mesié se le acabó lo bueno y ya le toca volver al tajo. Pero que tal si le damos un respiro al alma y los cinco euros que cuestan un par de helados los invertimos en una buena causa.
En Pakistan la situación es crítica, las inundaciones han dejado a más de 20 millones de personas sin nada y más de 1.600 muertos, y ahora las enfermedades han empezado a hacer su aparición amenazando a todos los afectados.
Con un pequeño esfuerzo de cada uno de nosotros podemos hacer mucho, únete y colabora, ellos te lo agradeceran, tu alma te lo agradecerá y podrá disfrutar de sus merecidas vacaciones.
Manos Unidas
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