Pues como todo llega, llegó el momento de ver esta película. Basada en un libro de Cormac McCarthy, como casi siempre mejor que su versión en celuloide, nos situamos en un mundo postapocalíptico que se esta desintegrando, los dos protagonistas, un padre y su hijo, intentan sobrevivir siguiendo la ruta de una carretera que no sabemos de donde viene ni a donde nos llevará. Sin zombies, ni infectados, aun así tendremos la tensión que provoca el ansia de sobrevivir en sus encuentros con otros sobrevivientes. Con una ambientación en tonos sepia muy bien conseguida y que resalta esa sensación de soledad, desolación y desesperanza y un Viggo Mortensen que es sinónimo de calidad, estamos ante una película muy recomendable. Que os aproveche.
No hay comentarios:
Publicar un comentario